En toda rutina de belleza del rostro, la limpieza es uno de los pasos más importantes y no siempre le prestamos la atención que se merece. ¿Cuál es el orden correcto para limpiar bien la cara? ¿Usamos agua micelar antes o después del jabón? ¿Qué productos son mejores para tu tipo de piel? ¿Puedo limpiar la cara de forma natural?
En Aldi nos preocupamos por el cuidado y la belleza de tu piel, y por eso en este post te contamos cómo limpiar la cara correctamente, para que puedas presumir de cutis radiante y sin rastro de impurezas.
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¿Cuál es la mejor manera de limpiar el cutis?
El refranero popular ya lo dice: la cara es el espejo del alma. Y nosotros añadimos: y la piel del rostro, más todavía. Una piel de la cara cuidada requiere mimarla a diario, con rutinas de higiene y mismos constantes y específicos según el tipo de piel.
El primer paso de toda rutina de belleza es la limpieza facial, es decir, limpiar los poros de la cara, deshacernos del sudor y de las impurezas que eliminamos por la piel y arrastrar todas aquellas sustancias que hayan podido ensuciarla (partículas, polvo, contaminación, cosméticos, maquillaje, etc.). Por esta razón te contamos cual es la mejor manera de limpiar el cutis.
Pasos para limpiar la cara
En líneas generales, estos son los pasos que deberás seguir al limpiar tu rostro:
- Lava la cara con agua templada, ni muy fría ni muy caliente. El agua es ideal para limpiar los poros de la cara en profundidad, llevarse la suciedad y el maquillaje.
- Sécala con suavidad, con una toalla limpia y evitando frotar demasiado para no irritarla.
- Es el momento de aplicar los productos para limpiar la cara (leche limpiadora, jabón, agua micelar… -te contamos los más utilizados un poco más abajo-), siempre adecuados a tu tipo de piel y haciendo un agradable masaje con los dedos para no dejarte ninguna parte sin cubrir. ¡Importante! Antes de aplicar el limpiador, humedece ligeramente la cara. Si quieres realizar una limpieza de cutis más profunda, puedes ayudarte de utensilios como un cepillo facial, para que los ingredientes penetren mejor en los poros y eliminen la suciedad.
- Aclara con abundante agua templada el producto que hayas elegido para limpiar tu cara y, si quieres, aplica el tónico facial.
- De una a dos veces por semana, es recomendable hacer una exfoliación de la piel del rostro, para deshacernos de las células muertas y de aquellas impurezas que se van acumulando en el interior y en los bordes de los poros, y que es más difícil eliminar en la rutina diaria de limpieza facial.
Productos para limpiar la cara
Cualquier formato es válido para limpiar la cara. Hay quien prefiere un producto en formato gel, y hay quien usa la pastilla de jabón de toda la vida. Hay quien usa limpiadores convencionales y hay quien busca cómo limpiar la cara de forma natural y emplea limpiadores de cosmética ecológica.
Lo más importante es que el limpiador que utilices sea lo menos agresivo posible y acorde a tu tipo de piel.
Estos son los productos más usados a la hora de limpiar el cutis:
Jabón
El jabón en pastilla para limpiar el rostro es una opción muy práctica que, además, cunde y dura mucho.
El jabón limpiador también puede encontrarse en otros formatos no sólidos, como líquido, espuma, mousse, etc.
Uno de los productos limpiadores estrella para después del jabón es el agua micelar, compuesta principalmente de agua más otros componentes. La gracia de este producto está en el poder limpiador de las micelas (partículas diminutas), que atraen la suciedad de la piel como si de un imán se tratara. Es apta para todo tipo de pieles, incluso las más sensibles.
De textura oleosa, son muy potentes a la hora de arrastrar la suciedad y los restos de maquillaje. De hecho, hay muchas mujeres que se han sumado a la tendencia de lo que conocemos como “doble limpieza facial”, importada directamente de Corea. ¿De qué se trata? Pues como su nombre indica, de limpiar la cara dos veces: la primera con un aceite limpiador, y la segunda con un producto de base acuosa. ¡Cara limpia y relimpia!
El gel con jabón para limpiar la cara deja una sensación muy agradable y fresca en el rostro. La gracia de la textura en gel es que se esparce muy fácilmente sobre la piel. Puede usarse solo o combinado con los aceites y las leches limpiadoras.
Se trata de uno de los cosméticos más usados para la limpieza del rostro, por su textura ligera (más líquida que una crema para limpiar la cara) y agradable, y por lo fácil que resulta aplicarla. Retira eficazmente la suciedad de la cara y los restos de maquillaje.
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